La verdad sobre el diezmo
Los pastores que quieren acumular mucho dinero capitalizan el pronunciamiento sobre Malaquías 3:10. Hacen creer a la gente que si quieren recibir una lluvia de bendiciones del cielo, deben pagar los diezmos.
¡Eso es un engaño claro! ¿Por qué? Porque Malaquías 3:10 no es un mandamiento para los cristianos sino para los israelitas.
Como está escrito en MALAQUIAS 4: 4,
Acordaos de la ley de mi siervo Moisés, de los estatutos y las ordenanzas que yo le ordené en Horeb para todo Israel.
Diezmar, o pagar el diez por ciento, es parte de la ley de Moisés. Sin embargo, esta ley ya no está vigente en la dispensación cristiana porque cuando vino el Señor Jesucristo, Él cambió la ley; Él cambió el sacerdocio. Por lo tanto, el cambio en el sacerdocio también requirió el cambio en la ley.
Como está escrito en HEBREOS 7:12,
Porque cuando se cambia el sacerdocio, necesariamente ocurre también un cambio de la ley.
La ley de Moisés había sido reemplazada por la ley de Cristo. Lo que tenemos que cumplir ahora es la ley de Cristo.
Gálatas 6: 2 dice:
Llevad los unos las cargas de los otros, y cumplid así la ley de Cristo.
La ley de Cristo no requiere que paguemos los diezmos. No tenemos nada que pagar. No les debemos nada a los pastores, entonces ¿por qué tenemos que pagarles? A los cristianos no se les ordena pagar diezmos. El apóstol Pablo declara explícitamente el mandamiento a los cristianos en su epístola a los hermanos en Corinto.
En 2 CORINTIOS 9: 7, dice:
Que cada uno dé como propuso en su corazón, no de mala gana ni por obligación, porque Dios ama al dador alegre.
Todo hombre, cada cristiano en la era del cristianismo no paga; en cambio, él da, contribuye o dona, de acuerdo con lo que su corazón le dice. El deseo de dar emana de su corazón, y la cantidad a ser dada también es dictada por su corazón. No hay una cantidad fija y la donación debe hacerse voluntariamente, "no de mala gana" porque "Dios ama a un dador alegre". Debido a esto, los cristianos del primer siglo que ayudaron a la obra de Dios en la Iglesia no solo dieron el diez por ciento.
2 CORINTIOS 8: 3 dice:
Porque yo testifico que según sus posibilidades, y aun más allá de sus posibilidades, dieron de su propia voluntad,
Dieron más allá de sus medios, por su propia voluntad; nadie les dictó cuánto deberían dar. Si está dando el diez por ciento, significa que no está dando por su propia voluntad, sino por la voluntad de su pastor.
Tenga en cuenta que la ley sobre el diezmo, que era parte de la ley de Moisés, era la voluntad de Dios durante el tiempo de los israelitas. Pero la ley de Moisés había sido reemplazada por la ley de Cristo. Y bajo la ley de Cristo, tienes que dar, no el diez por ciento, sino de acuerdo con lo que tu corazón propone.
¡Por favor, no dejes que te engañen!
[exclusión de responsabilida: Esta traducción en español: Es realizada por nuestros traductores con el máximo cuidado y lo mejor de sus capacidades. ControversyExtraordinary.com, sin embargo, no garantiza la exactitud de cualquier información traducida debido a varios factores. Cuando hay alguna discrepancia en la versión original en inglés y la versión en español, la versión en inglés siempre prevalece.]
0 comentarios: